Suma asegurada

Suma asegurada: El número que puede salvarte de un disgusto (y por qué no deberías ignorarlo)

Cuando contratas un seguro hay un concepto que lo cambia todo: la suma asegurada.

Imagina que tu vivienda se incendia y la reconstrucción cuesta 150.000 €, pero la tienes asegurada por solo 100.000 € entre continente (la estructura de la casa) y contenido (todo lo que tienes dentro). Esa será la cantidad máxima que podrías recibir para su reconstrucción, aunque tu hogar valga mucho más. En otras palabras, la suma asegurada es el importe máximo que la aseguradora pagará en caso de siniestro total. Ni un euro más. Por eso es crucial acertar con esta cifra, porque marca la diferencia entre recuperarte completamente o quedarte a medias.

Los errores más comunes:

  • Infraseguro: Asegurar por menos valor del real. Resultado: cobras menos de lo que necesitas.
  • Sobreseguro: Asegurar por más valor del real. Resultado: pagas prima de más sin beneficio extra porque la aseguradora nunca pagará más de lo que realmente vale tu bien.

La regla de oro está en encontrar el equilibrio: ajustar la suma asegurada al valor real de lo que quieres proteger. Y, muy importante, revisa la suma asegurada en cada renovación de tu seguro. El valor de tu coche/hogar/negocio cambia, así como los “extras” que vas añadiendo, y tu seguro debe reflejarlo.

Como tus corredores de confianza, nos aseguramos de que esta cifra esté siempre ajustada a la realidad. Porque un buen seguro no es el más barato, sino el que, llegado el momento, te protege de verdad cuando más lo necesitas.

También te puede interesar