Los informes declaran que si un coche hace más ruido hay pocas muertes. Aseguran que tienes un 20% más de opciones de ser atropellado por un coche eléctrico que por uno de combustión. O que un peatón solo dispone de un segundo y medio para evitar un atropello si aparece un coche eléctrico silencioso que esté a 8 metros.
La voz de alarma la dieron hace ya algunos mese tanto EuroNCAP como la NHTSA, los principales organismos que velan por la seguridad vial en Europa y E.E.U.U. La ausencia de ruido al circular se convierte así en un agravante para los atropellos en la ciudad. La Unión Europea ha decidido implantar el avisador acústico obligatorio a partir del 1 de julio de 2021.
En esa fecha los coches eléctricos o híbridos fabricados, en principio con peso inferior a 4,5 toneladas, estarán obligados a emitir un sonido que avise de su presencia en la vía a velocidades inferiores a 30 km/h. Se considera que desde ahí el ruido de rodadura es suficiente para alertar al peatón, ciclista o cualquier usuario de los nuevos medios de movilidad personal y urbana.
Según regulará la Unión Europea, este avisador deberá emitir un sonido similar al del motor convencional, con una frecuencia que deberá oscila entre un mínimo de 56 decibelios y un máximo de 75 decibelios. Este avisador cambiará de frecuencia hasta los 1.600Hz con el objetivo de que las personas mayores también puedan escuchar el sonido.