El climatizador de un vehículo es uno de los mejores inventos. Y aunque algunos conductores se olvidaban del calor del verano y compraban el coche fuera de la temporada de calor sin este extra, lo cierto es un elemento que mejora el confort y la seguridad. Pero ¿cuándo es mejor bajar la ventanilla que poner el aire acondicionado?
Hasta llegar a los 80 km/hora.
Desde el punto de vista del consumo de carburante, se suele decir que todo depende de la velocidad a la que vayas, pero la realidad es que hay muchos otros matices. Es verdad que siempre que pones el aire acondicionado o el climatizador, el sistema gasta:
- Energía en activar el compresor.
- Gas para que se produzca la reacción química pertinente.
- Más energía para impulsar y distribuir el flujo de ese aire frío por todo el habitáculo.
Por eso, se estima que si vas despacio, abrir la ventana puede hacerte ahorrar combustible para no consumir recursos del sistema, ni tener que pisar más el acelerador para suplir la potencia que pueda perder el motor.
Por contra, cuando superas los 80 km/h, lo normal es que la resistencia aerodinámica que generan las ventanillas abiertas hagan que no sólo no ahorres nada, sino que gastes más, por no hablar del ruido generado y además de perder una buena climatización en verano.
Cuando no estás en un atasco.
Aunque el automóvil esté desperdiciando combustible en las continuas paradas y arrancadas propias de un embotellamiento (especialmente, si no tiene start-stop), en ocasiones no conviene bajar la ventanilla ya que eso supone respirar toda la polución existente sin un mínimo filtro.
Si no hay niños y mascotas en riesgo.
Del mismo modo, tienes que tener especial cuidado con los niños para que:
- No sufran los rigores de los rebufos (ruidos, viento demasiado directo en la cara, salpicaduras, chinazos…) aunque tú estés cómodo en las plazas delanteras. Ten en cuenta que, además, se trata de un colectivo que es más vulnerable y se expresa peor en caso de viajar incómodo.
- No saquen ninguna parte del cuerpo por la ventanilla por los peligros evidentes que eso supone.
Antes de bajarte del coche.
También es saludable bajar un poco las ventanillas unos minutos antes de salir del coche en pleno verano (e ir apagando poco a poco el aire acondicionado) con el fin de ir equiparando la temperatura interior a la exterior y no sufrir el temido ‘golpe de calor‘, un contraste térmico enorme que puede provocar en las personas graves consecuencias.
